23 abril 2004

La Muerte lleva boina

A veces pasan cosas que dan miedo. Por surrealistas. Por extrañas.
A las 10 menos algo de esta mañana Lucía y yo esperábamos al autobús. De pronto vemos un globo aerostático recortándose en el cielo azul. Cerca. Al cabo de un rato volvemos a mirar, ya está lejos, pequeñito. Lucía dice: "cuánto humo echa, no?" y yo digo "y tiene forma rara". Y pienso que igual es forma de concha del Xacobeo (soy miope, ¿qué pasa?).
Entonces llega un viejo y nos habla. Dice "os que van aí... qué mérito teñen, porque iso cae e morren todos, é moito peso, falla o gas e morren todos...". Y nosotras le decimos que no hay que ser tan fatalista. Yo pienso "claro, y te subes a un coche y te estrellas y también te matas". El hombre se va igual que llegó.
Llegamos a la Facultad de Psicología. La primera psicóloga con la que hablamos nos dice: "Perdonad, es que estoy muy nerviosa, se acaban de matar tres chicos que iban en un globo..."
Inevitablemente pienso en el viejo que ya sabía lo que iba a pasar. Y tengo miedo.

18 abril 2004

Mi semana

Creo que va siendo hora de actualizar esto...
Y es difícil. No porque no me haya pasado nada (importante) en una semana entera. Tengo varios temas de los que podría hablar. Pero no sé cuál elegir, cuál va a ser más interesante para el resto del mundo. Por orden cronológico... debería decir que el miércoles me dijeron que si quiero ir a Praga la plaza es mía. Mucha competencia, sí. Tanta que la otra plaza quedó vacante :S. Así que me iré solita.
Y el jueves estuvimos entrevistando a peregrinos y al canónigo de la Catedral de Santiago (qué importantes somos!). Un alemán muy gracioso nos contó que era la tercera vez que hacía el camino... desde Alemania. Nos habló de la nieve, de sus rodillas, de sus amigos que abandonaron. Y él siguió solo. Pero entonces Paul -era su nombre- conoció a Philippa, una inglesa que también caminaba sola. Y llegaron juntos. Y no, no sé nada acerca de la naturaleza de su relación.
Y el viernes Cris debería haber venido a clase a última hora, porque no habría tenido que coger un tren. Porque resulta que nuestro profesor el loco (¿cuál de ellos?) se ofreció para llevarnos a casa a los que fuésemos de Vigo. Y nos llevó a dos. Y nos habló de que por la tarde iba a plantar tomates, de que había vivido cinco años en Londres trabajando para la agencia EFE, de que había estado en la Guerra del Golfo, en Israel, en el Líbano, de todas las cosas que hace (muchas, creedme), de lo mal que funciona la TVG, de que si convence a su mujer quizá en verano hagan el camino...
Y ayer sólo busqué información para un reportaje sobre niños y ordenadores... Iba a salir, pero las 3 de la mañana me pareció mejor hora para dormir.

10 abril 2004

La soledad del corredor de (medio) fondo

Quiero acordarme de más sueños. Mejor dicho, no quiero olvidarme de ellos dos minutos después de despertarme. Porque me despierto y los recuerdo tan bien... pero luego se borran, desaparecen. No sé por qué digo esto.
Quizá hoy no sea uno de mis mejores días. Tampoco es que haya sido malo (no, Lucía, te prometo que no :P), pero hay días en los que te das cuenta de que estás deprimido. Otros días te das cuenta de que eres casi feliz, pero hoy no ha sido de esos.
No creo que haya que buscar razones, es sólo que a veces dices "uy, hoy el mundo no me responde", y piensas en la soledad del corredor de (medio) fondo cuando deja de correr y mira a su alrededor... Y que nadie se sienta mal, porque es una soledad buena, en la que te gusta perderte un rato, sólo un rato-piensas -, porque si el corredor no vuelve a correr se queda perdido en el medio de la nada.
Y nos compadecemos todos juntos sin darnos cuenta. Todos juntos pero aislados. Las risas, los ruidos, y cada uno se da cuenta de que lo que él ve nadie más lo ve. Queremos comunicarnos (¿queremos?) pero no sabemos cómo. Nos convencemos de que es imposible.
Pero es fácil ir poco a poco. Sólo hay que cambiar la mentalidad. Pensar en cosas bonitas. Y no hay que ir muy lejos. Asómate a la ventana. Respira. Huele a hierba recién cortada y a rocío. Y no me quería poner bucólica, pero qué fácil es sentirse bien.
Y eso lo tengo siempre. Aunque luego lo que haga sea irme a la cama y buscar canciones tristes para dormir. Canciones que hablen de lo absurda que es la vida, esas canciones que sólo puedes escuchar de noche.
Y te duermes despacio, calentita. Y tendré tres, cuatro, cinco sueños. Por la mañana los recordaré un poco. Y luego desaparecerán.

08 abril 2004

El animal humano

En un momento de "El corazón de las tinieblas" de Joseph Conrad, se habla de la condición humana. En muchos momentos, más bien. Pero en uno de ellos se hace una reflexión que nunca me había planteado. Situémonos. Marlowe (el prota) va en una barca por un río perdido en una selva africana, no va él solo, pero da igual, todos están solos de alguna forma. Y escuchan a las tribus que los rodean. Caníbales.
Y Marlowe piensa que lo que le asusta de esas tribus no es lo inhumanos que son, sino todo lo contrario. Son humanos, igual que él. Y piensa que él podría ser perfectamente un caníbal, porque podría haber nacido allí y haberse educado así. Que es una característica tan humana como cualquier otra. Tiene miedo de esa humanidad, de poder ser él así.
Y si queremos generalizar -que no queremos- podemos pensar en tantas cosas. Se nos vienen a la cabeza un par de nombres, y mil situaciones que leemos todos los días en los periódicos (o que vemos en la tele, para qué engañarnos :P). Y sí, pensadlo, quizá en algún lugar de nuestra mente tengamos eso que hay que activar para salir en los periódicos por cualquier barbaridad. Porque es algo humano...

06 abril 2004

Desorden (hay un cuerpo colgado en la cocina??)

Debería ordenar un poco, la mesa del ordenador está hecha un asco. La cámara de fotos, el teléfono inalámbrico, un artículo de Heritage y Greatbatch (soy así­ de intelectual...:P), el Different Class de Pulp, el último de B&S, un diccionario de inglés coloquial, papeles y más papeles, disquetes, un diccionario de inglés normal, un recorte de periódico en el que hablan de Jarvis (Pulp!), los apuntes de economía del año pasado (?), una taza con elefantitos!!
A veces intento analizar mi relación con el orden. A mí me gustan las cosas ordenadas. Pero soy incapaz. Yo ordeno. Y luego el orden desaparece en un margen de 24 horas. Y aguanto como un mes o más acumulando mierda a mi alrededor hasta que me digo: "¡qué asco!" y vuelta a empezar.
Pero luego están mis manías. Hasta hace unos meses creía que tener los libros ordenados por orden alfabético de autor era lo normal, pero parece ser que no. Pero jo, en una casa con tantos libros como la mía, es lo mínimo que se puede hacer. Tenemos que hacer otra estantería, de todas formas. Tenemos libros en segunda fila.
Y heredé lo de ordenar los libros y ordeno mis discos. No sé, a mí me parece útil. Aunque el resto de la habitación esté hecha un asco.
Cris y Lucía también son desordenadas. Mm... ¿será cosa de artistas? (si no os dais cuenta, esto es para que dejéis comentarios :P)
PD: ¿Sugerencias con respecto al nuevo diseño? Lo iré cambiando (sé que está un poco cursi xD)

03 abril 2004

21 gramos de gatitos

Hace tiempo que no escribo...
Ayer fui a ver "21 gramos". Lo sé, no dispongo de información de actualidad, la película ya lleva mucho tiempo en los cines, pero yo la vi ayer. Y me gustó. Te obliga a cierta actividad cerebral mientras ves la película, y al acabar sigues pensando. En varias cosas. En la forma y en el contenido.
Piensas en la forma, en los planos, en el desorden cronológico. Y como ya sabes cuál es el orden, de forma inconsciente sigues situando planos y entendiendo más cosas.
Y en el contenido... Soplas. 21 gramos. ¿Es nuestra reserva de oxígeno? La expiración final. Soplas y sabes que no te quedas sin aire. No, aún nos quedan 21 gramos. El alma es aire.
Benicio del Toro feo y gordo pero a la vez sigue siendo él. Y Sean Penn, que ya lo ves y piensas "este tío debe ser inteligente", y resulta que lo es!! Aunque en "I am Sam" tenga cara deficiente mental (no me gustan los eufemismos, pero lo de decir "retrasado" me suena peor...). Sean Penn tiene un algo...
Ayer muerte y hoy vida. Gatitos nuevos. Más bien gatitas. Una de colores y otra gris. Por fuera, claro. Por dentro aún no sé cómo son. Pero la de colores chilla demasiado y la gris es más tranquila. Y su mamá la pantera (negra) te mira desde la caja de cartón con sus ojos brillantes. Te quedarás sin mano si te atreves a acercarla. Pero Qwerty (la pantera) es una buena gata. Es suave y blandita.
¿Cuántos gramos de aire habrá en sus pulmones recién estrenados?